Ingredientes para 4 comensales

• 2 unidad de sepia limpia
• 200 g de alubias blancas cocidas
• 200 g de guisantes frescos
• 1 unidad de manojo de cebollas tiernas
• 2 unidad de tomate
• 1 hoja de laurel
• 20 ml de vino blanco seco
• 2 diente de ajo
• 8 unidad de almendras tostadas y peladas
• 0.5 unidad de pan sin gluten
• 1 unidad de ramitas de perejil
• 40 g de aceite de oliva
• sal
• pimienta

La preparación

• En primer lugar, pela los tomates, las cebollas y un diente de ajo, pícalos a trozos pequeños.
• Pon al fuego una cazuela con el aceite, y sofríe un poco la cebolla, el ajo y el laurel, a fuego lento. Cuando la cebolla comience a transparentarse añade la sepia cortada en rectángulos de un centímetro. Tapa la cazuela y deja cocer durante 10 minutos, para que la sepia suelte toda el agua y después la vuelva a absorber.
• Cuando la cebolla comience a dorarse, añade el tomate y los guisantes, sofríelo todo hasta que el tomate se haya reducido. Agrega el vino y déjalo reducir a la mitad con la cacerola tapada. Cubre apenas con agua caliente, sazona y remueve un poco para que la sal se reparta de modo uniforme.
• Deja cocer a fuego muy bajo, con la cazuela tapada, hasta que la sepia y los guisantes estén tiernos. Debes vigilar que no se quede sin agua.
• Mientras, en un mortero, prepara una picada con el otro diente de ajo, el perejil, almendras y el pan tostado . Aclárala con una cucharada de caldo de cocción de la sepia. Cuando al sepia esté casia a punto, añade las alubias y la picada. Remueve y rectifica de sal. Deja cocer 10-15 minutos más.